lunes, 22 de julio de 2013

María Magdalena

Se arrepiente la persona a quien duele haber inferido una injuria a otro. Magdalena expresa su dolor sin palabras, pero de manera muy ostensible. Y Jesús que sabe hasta qué punto la conversión es una vuelta amorosa hacia Dios, mide el que demuestra sentir María Magdalena.
Se le perdona mucho porque ha amado mucho, sentencia Jesús. Se comprende que si su vida ha sido pública y escandalosa, notorio también ha de ser su arrepentimiento. La conversión comporta un cambio de mentalidad y María de tal manera sustituirá los atractivos de este mundo por los del evangelio del Hijo de Dios, que llevará su amor hasta más allá de la muerte de Jesús.

Reflexión

La bienaventuranza de la gente sencilla

Jesús da gracias al Padre porque revela sus verdades a la gente sencilla, ocultándosela a los sedicentes sabios. “Señor del cielo y tierra”, dice invocando a Dios. Y opone su grandeza a la  pequeñez del hombre sencillo, que es apenas. No es la sabiduría de la gente importante, sino la humildad de los harapientos lo que llama a la puerta del corazón de Dios.
Jesús, Hijo de Dios, es infinitamente pobre; a quienes son tan menesterosos como él, admira Dios.

Rincón poético

       REJUVENECIENDO

Si el corazón es viejo, si desprecias
cosas que reputabas atractivas
y empieza ya a tentar tu indiferencia
tu mirada interior,
si entonces te seduce un nuevo
arco iris de valores y comienzas 
de plácida manera,
pensarte a ti mi mismo,
vive con júbilo esta hora
ya tan cercana a Dios.
Es su escarpelo el que desbasta
el mármol de tu condición antigua.
Nunca será tan viejo como crees
tu corazón, que ya ha vivido tanto, 
mientras te mire bondadoso Dios.

(De A la sombra de un álamo)

No hay comentarios:

Publicar un comentario